Adobe lanzó su prueba piloto de lo que promete ser el futuro de la inteligencia artificial en el mundo de las imágenes. El sistema, que va a estar integrado con los demás programas que ofrece la empresa, va a operar como una especie de asistente de IA. Por lo pronto, la prueba gratuita permite conocer el potencial de esta herramienta a través de la generación de imágenes a partir de texto, y otras funciones que han desarrollado. Es posible que la revolución de Firefly marque un antes y un después en la forma en la que los ilustradores utilizan Photoshop para los servicios de Redes Sociales.
¿Qué es Adobe Firefly?
Adobe Firefly es el sistema de Adobe de inteligencia artificial que busca acaparar el mercado de generación de imágenes a través de IA. Al igual que otros programas con los que compite, como Dall-E, Midjourney, Stable, etc, tiene la capacidad de generar una imagen original a partir de un “prompt”, o texto en el que el usuario describe lo que quiere que su ilustración contenga.
Aunque desde ese punto de vista no se diferencia de las demás empresas, la particularidad de Firefly es que al ser parte de Adobe, la intención de la empresa es integrar por completo este sistema a sus diferentes programas: Photoshop, Illustrator, Creative Cloud, etc. La revolución es que se podría interactuar con la ilustración creada para continuar modificando hasta obtener lo deseado. Por el momento, sin embargo, esta función ha sido integrada únicamente en Photoshop, pero la expectativa es alta.
Eso sí, Adobe lanzó Firefly a través de una página web, a modo de prueba, para que todo el público pueda conocer la herramienta (y ellos puedan recibir el feedback producto de la interacción). A través de su web, y por medio de una prueba gratuita, cualquiera puede utilizar la IA sin necesidad de contar con la Suite creativa de Adobe, lo que permite poner a prueba los límites y las capacidades de Firefly.
¿En qué se diferencia Firefly de otras IAs?
Hay un detalle, una particularidad que hace que Firefly sea diferente a las competencias mencionadas anteriormente: Todas las imágenes con las que entrenaron a la inteligencia artificial son imágenes con libre uso de derecho de autor. No quiere decir necesariamente que fueran imágenes libres para todo el público, sino que eran ilustraciones para las que Adobe ya contaba con los derechos. Es que la empresa se especializa en los programas de diseño hace varios años, por lo que su banco de imágenes para las cuales tienen derecho de uso libre es realmente extenso.
Una de las consecuencias más evidentes de este enfoque es que algunos “prompts” no reproducen la imagen tal cual se desea. No sucede con cuestiones materiales u objetivas. Ocurre principalmente cuando se intenta imitar o plagiar las imágenes de otros artistas, o recrear ciertas personalidades públicas o logotipos de otras empresas. Esta función, que a priori podría parecer perjudicial, es quizás la gran diferencia con los otros sistemas de IA y sin lugar a dudas se trata de la propuesta de diferenciación de Adobe, desde el lado de la moral: “No plagiamos a nadie” aseguran.
No solo eso, sino que además el sistema elimina los resultados que considera dañinos. Ciertos términos están censurados (como tortura, sufrimiento, cuestiones relacionados con lo explícitamente sexual, etc.) y la inteligencia artificial al detectarlos devuelve un mensaje de error que avisa al usuario que las imágenes no se han podido crear. Nuevamente, otra limitación significativa para la IA, pero que, sin lugar a dudas, evidencia las intenciones de la empresa de avanzar con responsabilidad. Es cierto, hay dibujos que no vamos a poder crear, pero estas funciones permiten que uno le enseñe a usar la IA a un niño sin temer lo que pueda suceder si lo dejamos interactuar con la inteligencia artificial sin supervisión. ¿Te animarías a dejar a un chico de 12 años a solas con Midjourney?
¿Cómo funciona la IA de Firefly?
La interfaz es realmente sencilla, lo cual es una de sus grandes ventajas. Actualmente cuenta con cuatro herramientas posibles:
Texto a imagen
Esta función es similar a las de otras IA´s, pero tiene como detalle significativo una columna en la que se pueden elegir una serie de efectos, estilos y tipo de luz, etc. Estas opciones generan cambios notorios en la imagen generada. Es cierto, estas opciones se pueden “promptear” en cualquier generador de imágenes de IA, pero el hecho de que estén incluidos en la interfaz en forma sencilla permite que los usuarios que menos experiencia tienen en el mundo de la inteligencia artificial o el diseño puedan crear las imágenes que quieren con mayor efectividad.
Generative fill (generar relleno)
Una de las novedades de este sistema, que es quizás la propuesta innovadora de Firefly, es que, al contar con las herramientas de Adobe tradicionales, no solo permite crear imágenes, sino que permite editarlas, y generar cambios impulsados por la inteligencia artificial. Hace años que Photoshop diseña sistemas que permiten detectar (a mayor o menor medida) diferentes objetos, para poder diferenciarlos de otros y agilizar los procesos de edición. La varita mágica (Como se llama en Adobe) parece haber llegado a su punto más alto, ya que ahora permite detectar lo que está al frente de una imagen y lo que está detrás en forma automática.
Esta herramienta está integrada a Generative fill, lo que permite identificar el objeto principal de una imagen y diferenciarlo del fondo para, posteriormente, crear un nuevo fondo con inteligencia artificial. Esto se puede realizar tanto en creaciones que hayamos realizado previamente con la IA como en imágenes que subimos desde nuestra computadora. Si el método de detección automático no elige la zona exacta que queremos, tiene además la posibilidad de delimitar el área que queremos modificar de forma manual. Ya no existen excusas para no tener esa foto en la playa en las redes en época de verano, incluso si te tocó quedarte trabajando en la ciudad y no pudiste pisar la arena.
Efectos de Texto
Esta función permite generar un texto con una trama generada a partir de lo que queramos. En concreto, colocamos el texto que queremos, le indicamos qué nos gustaría que tuviera el relleno, elegimos el estilo y la IA hace el resto. Hasta el momento las tipografías disponibles para preseleccionar son escasas, y en las redes recibieron críticas por la falta de estética que presentaban. Sin embargo, es evidente que la empresa va a continuar expandiendo la base de tipografías disponibles, pero su política respecto al uso de materiales para los que no cuenta con la licencia es bastante estricta, y en definitiva, es su punto fuerte.
Recoloreo Vectorial (“generative recolor”)
Como parte de una herramienta que pretende potenciar la experiencia de uso de Illustrator, el recoloreo vectorial permite cambiar la paleta de colores de una ilustración para aplicar diferentes estilos. Lo curioso es que permite generar nuevos estilos a partir de un texto, lo que implica que puede generar una paleta de colores a partir de un concepto.
¿Cómo usar Firefly para generar imágenes?
Actualmente el acceso a Firefly es gratuito y es realmente sencillo empezar a utilizar esta herramienta. El único requisito es darse de alta en el sistema con un ID de Adobe. Quien no cuenta con este ID puede crear uno en poco más de un minuto, es completamente gratuito, y no piden suscripción de ningún tipo. Una vez tienes el ID de Adobe, desde la página de Firefly puedes realizar todas las operaciones que quieras sin límite. A la hora de la descarga de imágenes, Adobe incluye una marca de agua en un costado de la imagen, y solicita que, de publicarse, se haga con dicha marca, entre otros motivos para dar cuenta que la imagen fue generada con inteligencia artificial.
¿Puede Firefly ser la IA del futuro?
Está claro que las limitaciones autoimpuestas, junto con el hecho de que esta IA se lanzó un poco más tarde que sus competidores, hicieron que Firefly no genere el revuelo que generaron otros productos similares. Sin embargo, es evidente que la apuesta de Adobe es a largo plazo.
Por un lado, se presenta como una opción responsable, que puede utilizarse en forma educativa, y que busca evitar ser centro de polémicas. Por otra parte, su integración con la suite Adobe, cuando se vuelva efectiva, va a permitir una serie de usos que actualmente las demás no ofrecen. ¿Alcanza la integración para convertirla en la IA de imágenes del futuro? ¿Estamos dispuestos a aceptar que una gran cantidad de elementos que le pedimos no los puede reproducir por su intención de ser responsables?
Es evidente que habrá que esperar a que la integración sea completa. La sensación es que el potencial que tiene es enorme, pero que todavía le falta un buen camino para recorrer.
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